Pedro Antonio Louceiro Firmino falleció la mañana de este jueves a la edad de 66 años, a causa de diversas complicaciones cardíacas. Louceiro nació en la localidad de Sousel, Portugal, el día 1 de diciembre de 1952, en esta tierra que también vio nacer su padre y patriarca de esta dinastía.

Tomó la alternativa como rejoneador la tarde del 19 de enero de 1986 en Guadalajara, de manos de Pedro Louceiro, su padre, ante el testimonio de Jorge Hernández Andrés, Eduardo Fountanet y Paco Barona. Y confirmó la alternativa en la Plaza México el 28 de diciembre de 1997, de manos de Enrique Fraga, que por entonces era su cuñado, y le cedió la muerte de un toro de la ganadería de Manolo Martínez con el que estuvo entonado.

Además realizó una destacada trayectoria como forcado y perteneció a los grupos de Forcados de Montemor y Focados de Évora, entre otros. Una vez en México, fue el fundador del grupo de Forcados Mexicanos en enero de 1978, siendo la localidad de Tenango del Valle, Estado de México, su primera presentación en público. Esta primera piedra iba a ser fundamental para el surgimiento de un gran número de grupos que, al cabo de cuatro décadas, reviste una enorme importancia para la tauromaquia mexicana, conjuntamente con la de Portugal.

Le sobreviven su esposa y sus hijos Ana, Pedro, Diego y Miguel, quienes además llevan en conjunto el proyecto Casa Louceiro en la zona del marqués del estado de Querétaro, donde continúan con el legado y promoción de la cultura ecuestre, en honor a su abuelo y a su padre, respectivamente.

Pedro era un hombre aguerrido, fiel al concepto de raza e ímpetu de los cavaleiros, y un hombre que dedicó su vida a los caballos, tal y como lo aprendió de su padre, don Pedro, aquel carismático rejoneador luso que llegó a México a comienzos de los años setenta para formar a toda una camada de rejoneadores y, de paso, fundar una importante dinastía de rejoneadores y forcados con su apellido, todos con ese carácter romántico y apasionado tan propio de los toreros portugueses.

Sus restos serán velados a partir de las 18:00 horas de esta tarde,  en la hacienda "La Cañada" de Tepeji del Río, Querétaro, donde se dará el último adiós al rejoneador y forcado en compañía de familiares y amigos. Desde esta redacción enviamos nuestro más sentido pésame. Descanse en paz.