El joven diestro potosino Fermín Rivera se impuso y triunfó en la corrida celebrada este domingo en Ciudad Juárez, Chihuahua, pues paseó la única oreja de un festejo en el que los hidrocálidos Héctor de Granada y Gerardo Adame fueron aplaudidos tras realizar un importante esfuerzo.
Fermín Rivera recibió a su primero, el mejor toro de la tarde, con magníficas verónicas. Al salir del encuentro con el piquero, el ejemplar dio una vuelta de campana, y Fermín le hizo unas chicuelinas muy bien marcadas.
Aprovechando el buen recorrido del toro, Rivera realizó su toreo por ambas manos, en el cual el astado pasaba con limpieza, en una faena larga y muy apreciada por el respetable; al entrar a matar consiguió dejar menos de media estocada y a petición del público se le entregó la oreja.
Ante el inicierto quinto batalló Fermín con el capote. El burel no iba al caballo y fueron algunos minutos hasta que el picador Eduardo Rivera realizara una suerte forzada para poder picarlo; de lo mejor en este quinto fue el par de banderillas del tapatío Manolo Fuerte, que fue muy aplaudido.
A Fermín se le ven muchas hechuras y se le ve esa cadencia y seguridad en caminarle a los toros. Estuvo voluntarioso el potosino, pero no pudo hacer nada ya que el astado fue soso y reculaba. Batalló un poco para matarlo y se retiró entre palmas.
El veterano diestro Héctor de Granada, que comenzó hoy una breve temporada de despedida, recibió a su primero con bonitas verónicas. En el ultimo tercio estructuró una faena derechista siendo ovacionado, ya que el astado no quería nada por el lado izquierdo. Mató de pinchazo y una entera para ser aplaudido.
En su segundo, que fue el de su despedida de esta tierra, Héctor saludó con un farol de rodillas que fue ovacionado y cuajó después bellos lances a la verónica. El hidrocálido estuvo voluntarioso con la muleta, pero el toro no iba y decide terminar su faena. En el momento que se empezaron a entonar las notas de las golondrinas, el público le aplaudió fuerte.
Gerardo Adame es un diestro que, aunque no ha triunfado en esta frontera, la afición de Ciudad Juárez aprecia por ese carisma que tiene desde el dia de su presentación; lástima que en esta tarde tampoco haya tenido suerte. Adame recibió a su primero un poco apresurado con verónicas y se fue asentando.
Con la muleta realizó tres tandas de derechazos, pero el astado fue de más a menos y la faena nunca tomó el nivel que se esperaba. Remató de tres cuartos de estocada y una caída.
Al sexto de la función lo saludó con verónicas. Y más adealnte ya no pudo hacer prácticamente nada, debido a la nula colaboración del toro; como siempre, estuvo muy voluntarioso. Mató de tres cuartos de estocada y escuchó palmas.