Pepe Murillo se despidió de forma emotiva este sábado en Tlaquepaque, y dio una vuelta al ruedo al son de las "Golondrinas", mientras que su hijo, del mismo nombre, tuvo una magnífica actuación y cortó las dos orejas, saliendo en volandas.
Disfrutó Pepe Murillo hijo al veroniquear a su primero, para luego quedarse estoico en un quite por gaoneras. En el tercer tercio inicia con un cambiado por la espalda, ligando después varias series de derechazos y naturales.
Los muletazos resultaron templados y muy largos, aprovechando a cabalidad las buenas condiciones de este toro, que tenía recorrido y acudía humillado. Remató con una estocada, un tanto caída, y se le otorgaron las dos orejas.
A su segundo lo recibió de nueva cuenta con buenas verónicas, rematando con una media. En el tercer tercio logró varios buenos derechazos y naturales, aunque el astado se quedaba corto. Temrinó de media estocada y descabello.
Pepe Murillo padre, vestido de azabache y oro para esta ocasión especial, consiguió emocionar al tendido con un terso toreo de capa ante su primero, que realmente fue lo más sobresaliente de lo que pudo hacer, pues el morito pronto se quedó muy parado
En su segundo toro, el de su despedida, realizó una faena realmente emotiva, brindándole a su hijo. A este ejemplar le pudo sacar varios derechazos de buena factura al son de las golondrinas y, si no cortó la oreja, fue porque a la estocada le antececieron dos pichazos Fuerte ovación de la concurrencia y da la vuelta al ruedo acompañado de un mariachi.
Manolo Mejía trazó verónicas con arte, en el tercer tercio se querenció en tablas sacándole algunos derechazos y naturales muy forzados. Tras una estocada tendida, recibió fuerte ovación. En este toro hubo una muy buena vara de Erick Morales.
En su segundo toro dibujó una media verónica de pintura, para luego tomar la sarga y ligar buenos momentos en un afaena derechista. Lástima grande que no estuvo fino con la toledana y todo quedó en una salida al tercio.