La tarde hoy lunes la plaza registró un lleno total para presenciar la actuación de un Antonio Barrera que no se entendió del todo con el bravo lote que le ha tocado en suerte; un Fandi entregado y deseoso de triunfo y un Rafael Orellana voluntarioso que acuso la falta de rodaje antes seis bravos y nobles toros colombianos de Miguel Gutiérrez, que debieron irse todos al destazadero sin orejas.
El Fandi armó un gran lío luego de colocar cuatro pares de banderillas de adentro afuera, además que el toro le exigía mucho, impidiéndole correr en línea recta. En la muleta ha tenido la virtud de entender las largas, humilladas, bravas y encastadas embestidas del toro, realizando faena por ambos pitones. Mató de una estocada desprendida y le concedieron las dos primeras orejas de su brillante actuación.
Con el quinto lució mucho sus condiciones físicas en el tercio que domina, destacando en un espectacular par de la moviola. Para la muleta ha tenido un toro excepcionalmente bravo, noble, con fijeza, que embestía incansablemente, y al que le ha realizado faena muy emotiva por ambos pitones en la que hubo muletazos suaves, largos y profundos. Y como mató de una estocada fulminante, que tumbó al toro sin puntilla. La gente, que había pedido el idulto, no dudó en solicitar los máximos trofeos para el torero granadino que los paseó en la triunfal vuelta al ruedo.
Por su parte, el otro torero andaluz de este cartel, Antonio Barrera, le correspondió un toro bravo que en el caballo dio pelea y causó un tumbo al picador. En la muleta fue encastado, pues embestía hundiendo el hocico en la arena producto de lo mucho que humillaba. Barrera realizó varias tandas por el pitón derecho, pero sin conseguir el sitio ideal para templar y acoplarse, y por lo cual el toro empezó a quedarse corto. El diestro dudó mucho, y pasó más tiempo probando el sitio, por lo cual la faena se diluiyó. Mató de un par de estocadas defectuosas y dejó escapar un triunfo importante.
Con el cuarto comenzó su faena con dos cambiados por la espalda, a un toro bravo, noble y repetidor. Y a partir de ahí, le cambió los terrenos al bravo oponente, dando la impresión que no se entendía con él hasta terminar toreándolo un tanto apurado antes de darle muerte de una estocada ladeada.
Rafael Orellana banderilleó con mucha voluntad al tercero y conectó con su público. Después inició su primera faena doblándose con el toro para llevarlo a los medios, pero aquí se mostró un poco embarullado en su planteamiento de faena. Finiquitó al de Miguel Gutiérrez de dos pinchazos, un pinchazo hondo y dos golpes de descabellos.
Con el sexto hizo una faena por ambos pitones. Aprovechó las buenas embestidas en tandas largas, en terrenos comprometidos, y también toreó bien al natural. Su fallos a espadas le privaron de obtener trofeos, pues mató de tres pinchazos y estocada.
Mérida, Venezuela.- Plaza "Román Eduardo Sandía". Lleno en tarde agradable. Toros colombianos de Miguel Gutiérrez, bien presentados, bravos, con fijeza, movilidad, encastados y sobre todo con nobleza en grandes dosis. El 4o. fue premiado con vuelta al ruedo; se llamó "Queteño", número 44, negro entrepeldo, con 436 kilos. El toro de las dos orejas y rabo fue "Sinsonte", número 108, negro zaino, con 495 kilos, e inexplicablemente la autoridad no concedió el arrastre lento. Pesos; 480, 435, 480, 436, 495, 425, 455. Antonio Barrera (azul pavo y oro): Palmas y oreja. David Fandila "El Fandi" (azul marino y oro): Dos orejas y dos orejas y rabo. Rafael Orellana (tabaco y oro): Palmas en su lote. Observaciones: En el primer toro de la tarde, el banderillero Mauro David Pereira sufrió una fuerte voltereta de la que resultó con un desplazamiento de una clavícula y fractura de cadera. El Fandi salió a hombros con el ganadero Miguel Gutiérrez.