El matador Miguel Ángel Perera salió esta mañana de la Clínica del Sagrado Corazón de Sevilla, donde permanecía ingresado desde que ayer tras haber sido sometido a una intervención de su lesión de columna denominada vertebroplastia.
La evolución del torero es buena, por lo que el neurocirujano Francisco Trujillo le ha dado el alta, aunque el torero tendrá que permanecer en reposo durante unos días en su domicilio. La próxima semana se le realizará una nueva revisión y en los primeros días de octubre le realizarán pruebas para comprobar cómo evoluciona la vértebra L2, que fue aplastada y fracturada en el percance que el torero sufrió en San Sebastián.
Estas pruebas servirán para decidir cuándo puede comenzar la rehabilitación.El doctor Trujillo afirmó, después de intervenir al torero, que la operación había sido un éxito y que todo indica a que se reducirán notablemente los plazos de recuperación de la lesión que sufre y que le obligó a cortar la temporada el pasado 28 de agosto, dejando varios contratos sin cumplir por esta lesión.