Arturo Macías sufrió una cornada grave en el tórax, mientras toreaba en El Puerto de Santa María, a la hora de entrar a matar al segundo toro de su lote, del que le concedieron una oreja que paseó la cuadrilla, en medio de la conmoción del público que se quedó estaba en la plaza.

Según el primer parte médico del doctor Julio Mendoza, y después de explorar la herida bajo anestesia general, Macías "presenta dos heridas en la cara lateral del hemitórax derecho, que se comunican entre ellas, con un trayecto que atraviesa la pared torácica y le produce un neumotórax".

Una vez anestesiado, en la primera operación se le "dejó un tubo de Neratón en el hemitórax derecho, se le exploró y se comprobó la reexpansión del pulmón derecho (que se había contraído). El pronóstico de la lesión es calificado de muy grave".

El doctor Julio Mendoza aseguró que Arturo "se encuentra estabilizado, pero ni mucho menos fuera de peligro. Las dos cornadas tienen una extensión de seis centímetros cada una, y hay una trayectoria que las comunica, y otra que se introduce en la cavidad pulmonar. El pitón del toro rompió la pleura y la musculatura intercostal. Lo hemos operado en la enfemería de la plaza y ha sido enviado a una clínica de Sevilla, pues tal vez requiera más cirugía".

El matador hidrocálido fue trasladado de emergencia, en una Unidad de Vigilancia Intensiva móvil, a la Clínica Los Álamos de Jerez de la Frontera, que está a unos cuantos kilómetros de distancia.

El último reporte enviado por Emilio Méndez, su jefe de prensa, indica que la pleura sufrió desgarros, pero no fue perforada, de tal forma que Arturo no tendrá necesidad de pasar nuevamente por el quirófano, y se encuentra en la Unidad de Terapia Intensiva, donde pasará la noche para que los médicos que le van a atender en Jerez informen mañana a primera hora la evolución de su estado de salud.

Esta es la tercera cornada que sufre Arturo Macías en España, y la cuarta del año 2010, pues antes de marcharse a Europa fue herido en la plaza mexicana de Mérida. Posteriormente, sufrió una cornada en Valencia, entrando a matar, de forma similar a la de hoy, ya que también lo premiaron con una oreja que sí pudo recibir en mano. Asimismo, sufrió otro percance grave en la Maestranza de Sevilla.

Aunque aún no se sabe cuándo podrá reaparecer, lo más probable es que pierda las dos corridas que tenía contratadas el próximo fin de semana, el domingo 1 en Azpeitia, y el lunes 2 en Íscar.

Acompaña esta información una excelente secuencia fotográfica de la cornada, así como algunos pasajes de la faena, obra del prestigiado fotógrafo mexicano Pablo Esparza.