Una mala racha de cornadas y lesiones se desató en los últimos días, de las que se recuperan favorablemente distintos toreros mexicanos, tanto aquí como en España, después de haber pasado todos por enfermería de las plazas, clínicas y hospitales de distintas ciudades.

Jerónimo se recupera de la herida que se produjo en la muñeca izquierda el miércoles pasado mientras toreaba un festival en la localidad hidalguense de Pachuquilla, y ya fue dado de alta del Sanatorio Durango de la capital donde fue operado de los tendones, bajo la supervisión del doctor Jorge Uribe.

El percance se suscitó al entrar a matar, con uno de los arpones de las banderillas que había en el lomo del ejemplar del El Vergel que le tocó en suerte.

Santiago Fausto salió del Hospital "San Javier" de Guadalajara el miércoles por la tarde, después de haber permanecido ingresado tres días como consecuencia de la cornda que sufrió el domingo pasado en el muslo derecho.

El novillero queretano perdió la novillada del lunes pasado en Chimalhuacán, y también la de esta noche en Morelia, donde inauguraba el ciclo de festejos menores.

Alejandro Amaya, herido en la plaza española de Baza (Granada), el sábado 12 de septiembre, salió ayer del area de cuidados intensivos y espero ser dado de alta en las próximas horas.

Angelino de Arriaga sigue hospitalizado tras la fuerte cornada que tuvo el pasado martes en Navalperales, donde un novillo le atravesó el muslo. El tlaxcalteca tendrá que cortar la temporada y, por tanto, el magnífico paso que llevaba en cosos de España y Francia.

Aunque ya está montando, el rejoneador Rodrigo Santos no pudo reaparecer ayer en Pachuquilla, según era su intención, pues aún no está totalmente recuperado de la cornada que le infirió un toro de Real de Valladolid en Zacatecas el domingo 6 de septiembre.

Alfonso Mateos ya retomó sus entrenamientos tras la cornada sufrida en Guadalajara el mismo día. El novillero poblano tratará de ponerse en forma rápidamente para reaparecer en la perla tapatía antes de que termine la campaña.

Asimismo, el novillero Ernesto Javier Tapia "Calita" se encuentra en su domicilio de Sevilla haciendo ejercicios de rehabilitación luego de la cornada que le dieron en la plaza española de Calasparra el martes 8 de septiembre.

Arturo Salvídar regresó a casa de su maestro y apoderado Juan Cubero, para reestablecerse de la recaída que tuvo hace algunos días, y que le llevó de nueva cuenta al hospital aquejado de una tromboflebitis, provocada por las secuelas de la gravísima cornada en al femoral del muslo derecho que sufrió en Santa Cruz de Retamar (Toledo) el pasado 23 de agosto.

El más reciente de los heridos, el rejoneador Gastón Santos, que sufrió una severa fractura de tibia y peroné, también está a la espera de salir del Hospital "San José" de Monterrey, donde fue operado en la madrugada del jueves. Es posible que mañana le den el alto y se marche a su casa.