La tarde de este domingo se llevó a cabo la cuarta novillada de la temporada misma en la que realizaron el paseíllo los jóvenes Rodolfo Mejía “El Tuco”, Arturo Soto, Pepe Vargas, Mariano Sescosse, Iván Hernández y José Fernando Sandoval. Al final de la tarde sólo el aguascalentense Iván Hernández ha cosechado un trofeo.
La cantera de Aguascalientes es inagotable y para muestra un botón más. Iván Hernández saludó a sus paisanos con lances a la verónica y un importante quite por faroles. Clavando las zapatillas en la arena inició su faena por alto para cambiarse la muleta por la espalda hasta en tres ocasiones.
Aprovechando las buenas condiciones del novillo ejecutó varias series en el terreno de los medios mismas que fueron bien rematadas, poco a poco y con mucha determinación fue arrancando muletazos de valía que le fueron muy coreados, para terminar su labor ejecutó variados detalles. Con hambre de querer ser, literalmente se encunó en los pitones para ejecutar una estocada fulminante misma que le valió el corte de una oreja.
Con el que abrió plaza Rodolfo Mejía “El Tuco” se fue frente a la puerta de toriles para recibir con una tafallera, lances a la verónica y un variado quite fueron sus cartas con el capote. Su labor con la muleta fue basada en el terreno de los medios donde dimensionó en un primer momento el toreo por el lado derecho, al no ver condiciones por el izquierdo desistió del toreo al natural.
Otra parte de la faena fue desarrollada entre las líneas concéntricas donde las cosas se dieron entre la valentía y la exposición, con una gran determinación se fue tras el acero y aunque el astado tardó en doblar al final la gente sacó los pañuelos, mismos que no hicieron eco en la autoridad. Una vuelta de reconocimiento.
Mariano Sescosse ha dimensionó un pinturero toreo a la verónica y ante el quite de Iván Hernández realizó la réplica por chicuelinas. De manera elegante y de las tablas a los medios inició su labor muleteril corriendo la mano por el pitón derecho, en el centro del redondel escuchó el estímulo que aumentó al ejecutar finos detalles.
Después de hacer un interesante trasteo y como epílogo de su actuación toreó por bajo para preparar la muerte, misma que lamentablemente tardó en llegar, como resultado la vuelta al ruedo.
Para presentarse en la San Marcos, Arturo Soto se abrió de capa primero en tablas y después en los medios por lo que fue aplaudido. Los primeros oles de la faena llegaron cuando de rodillas corrió la mano en el terreno de las tablas, para continuar su labor se fue a los medios y ante las pocas condiciones del novillo hubo de arrancar los muletazos de uno en uno constituyéndose en el mérito precisamente el permanecer muy cerca de los pitones; tras demostrar la valentía y el conocimiento de los terrenos, lamentablemente llegaron los fallos con la espada. Al final el silencio.
José Fernando Sandoval ha tenido una presentación muy discreta con el capote mientras que con la franela mostró ganas de trascender, al margen de su poco rodaje mostró condiciones acordes con su trayectoria. Con Sandoval debemos dar tiempo al tiempo ya que hoy ha mostrado lo esencial que son las ganas. Aunque por momentos estuvo a merced del novillo al final escuchó además de palmas dos avisos.
Después de varias temporadas el español Pepe Vargas ha regresado a la San Marcos desgraciadamente no pudo lucir ni con el capote, ni con la muleta; aunque en descargo del peninsular debemos consignar las pocas condiciones del astado que en todo momento buscó lo que había detrás de las tablas. Al final pasó el tiempo y llegó un aviso.