Alejandro Talavante y Arturo Saldívar, que sufrió una cornada en el escroto, compartieron el triunfo en la segunda y última corrida de la Feria de Moroleón, Guanajuato, pues cortaron dos apéndices por coleta, mientras que Mario Aguilar dejó también buen sabor de boca y paseó una oreja.
Un inspirado Talavante ha cuajado una faena variada, en la que derramó sentimiento y sello propio y con ese arte de sorprender con creatividad con la capa y la muleta de frente a un muy buen ejemplar de Barralva que hizo quinto de la tarde y que fue de arrastre lento.
El extremeño le cortó las dos orejas, dando la vuelta al ruedo con los ganaderos como hace un año en la que Talavante le cortó un rabo a un toro con este mismo hierro y que se llamó "Rómpete ya".
Por su parte, Arturo Saldívar le cortó las dos orejas al primero de su lote en una faena de poder y buen trasteo, valor que pago con sangre ya que fue herido con un puntazo en el escroto por lo que al terminar su labor con su segundo, se fue a los servicios médicos para ser atendido.
También toco pelo Mario Aguilar, que estuvo a la altura de las circunstancias y cuajó dos faenas de calidad; al que cerró plaza le corto el apéndece, merecido premio tras rematar de una estocada.