El matador zacatecano Antonio Romero comenzó a torear de salón y a retomar sus entrenamientos, luego de la positiva evolución tras la cirugía de "reconexión" a la que fue sometido como última parte del tratamiento quirúrgico derivado de la grave cornada sufrida el 19 de marzo en la Plaza México por un toro de Piedras Negras.
Durante los últimos días, Romero se ha sometido a terapias de rehabilitación, las cuales consisten en electro-estimulación y ultrasonido, además de ejercicios de resistencia y fuerza en gimnasio.
"Ya empezar a entrenar de salón es algo que me hace mucho ilusión, dado que gran parte de mi recuperación tan rápida han sido mis ganas de volver a estar vestido de luces y en la cara del toro. Tengo todavía dolores en la pierna derecha, pero poco a poco iré recuperando el ritmo", explicó el zacatecano.
Si todo continúa bajo en mismo tenor, Antonio Romero estará listo en un par de semanas para reaparecer en el campo y volver a ponerse delante de un animal bravo.
"Espero poder hacer campo ya en un dos semanas. Me alienta mucho el ya poder estar listo de volver al campo bravo y tentar algunas becerras, seguir adelante con mi preparación y poco a poco ir intensificando el entrenamiento físico, esperando que pronto sanen las secuelas que todavía quedan", sentenció.