Banners
Banners

Agarrón de puerta grande en Querétaro (video)

Viernes, 23 Oct 2015    México, D.F.    Álvaro Borbolla | Foto: Juan Noguez           
Joselito y El Payo salieron a hombros de la plaza Santa María
¡Cuando la fiesta gana, ganamos todos! Esto fue lo que sucedió en la Santa María de Queretaro la noche de hoy: ganó la Fiesta. Y ganó desde todos los ángulos posibles: ganó, por principio de cuentas, porque ayer quedo claro que el toreo mexicano tiene en Joselito Adame y El Payo a dos verdaderos gallos de pelea; toreros con pundonor, entrega, valor y, sobre todo, argumentos sólidos en los que fundamentaron faenas que estuvieron llenas de contenido y solvencia.
 
Al final ambos salieron a hombros con la satisfacción de haber expuesto algo importante y en medio del contento general del público, que hizo una buena entrada si consideramos las condiciones del clima imperantes, y esa molesta llovizna que nunca cesó.
 
La corrida de La Joya resultó noble, en términos generales, pero le faltó fuerza; le faltó ese brío que suelen tener los toros verdaderamente bravos en el último tranco de su embestida, cuando se desplazan con convicción y tratando de alcanzar los engaños. Pese a ello, la falta de chispa de los toros la aportaron los dos toreros del cartel, cada uno con su estilo y sus formas.
 
Joselito Adame ha conseguido este año hacer una temporada importante en España, y eso se nota en su manera de citar, de ponerse delante, de mostrar la muleta y de acompañar las embestidas con la cintura.

Al toro más remiso lo obligó a embestir; al noble y con buen estilo, se lo enredó por la faja haciéndole las cosas muy bien, y con el que tuvo un poco más de fuello nos mostró toda su variedad, tanto con el capote como con la muleta y, además, hasta se dio el lujo de banderillearlo con soltura, un hecho que agradó mucho a la gente.

A los tres toros procuró llevarlos siempre muy embebidos en las telas, tapándoles bien la cara y pasándoselos cerca. También resulta evidente que esa confianza adquirida en estas temporada europeas lo están llevando a buscar caminos expresivos distintos, y a procurar los trazos con mayor suavidad en los toques y más ritmo en la ejecución. Dio gusto esta noche ver cómo defendió su sitio.

Y si Joselito tuvo un poco más de suerte a la hora del sorteo, El Payo no se quedó atrás en su afán de triunfo en esta nueva etapa bajo el apoderamiento de Pablo Álvarez "Palillo", que además fue el empresario de esta fecha.

El queretano toreó muy bien con el capote, con ese empaque tan especial que ahora tiene. Llevó a los toros hacia adentro, cargando la suerte en las verónicas, y sus remates son cada vez más profundos, tratando de rematar a los toros atrás de la cadera. Con la muleta dejó pasajes muy buenos, toreando mucho de muñecas sueltas y rotas, toreando para él para gustarnos a nosotros.

Ante la condición adversa de su lote fue preciso dar ese extra y terminar las faenas exponiendo. Y puso los muslos cerca de los pitones con verdad, más todavía ante el complicado séptimo de la función, que se defendió con peligro y sabía bien donde se colocaba el torero. Su balance fuer de oreja por toro, pero más que eso fue la impronta de un torero que avanza y se consolida.

Cabe mencionar que los dos toreros estuvieron hechos "unos tíos" con la espada, pues a los seis toros del mano a mano los despacharon de seis estocadas, un hecho que les confiere todavía con mayor categoría ese título de "matadores de toros".

Abrió plaza el rejoneador Alejandro Zendejas, que intentó estar a la altura del compromiso con un toro de Julián Hamdan que fue distraído y no sirvió para el toreo a caballo, pues parecía estar reparado de la vista. Hizo su mejor esfuerzo con escasos resultados, mientras que el grupo de Forcados Queretanos lograron una buena pega al segundo intento.

Y a la salida de la plaza muchas personas quizá reflexionaron que también ganó la Fiesta a las inclemencias del tiempo, con el amenazador huracán "Patricia" azotando gran parte del litoral mexicano. Salimos contentos del coso mirando a los toreros a hombros, orgullosos, y a la afición dispuesta a volver para disfrutar de un espectáculo tan emotivo como didáctico, por que ayer, estos dos gallos mexicanos, nos dieron una verdadera lección de cómo se compite con argumentos sobre la arena.

Ahora habrá que esperar el cartelazo del viernes 27 de noviembre, donde ya figuran los nombres de Enrique Ponce, José Mari Manzanares y Fermín Espinosa "Armillita IV", con toros de Julián Hamdan. ¡Así que la Fiesta vive!

Ficha
Querétaro, Qro.- Plaza Santa María. Dos tercios de entrada en noche fresca y con ligera -y molesta- llovizna desde el comienzo. Un toro de Julián Hamdan para rejones, deslucido y como si estuviera reparado de la vista, y seis de La Joya, bien presentados, nobles en su conjunto pero justos de fuerza. Pesos: 486, 485,480, 487, 481, 478 y 510 kilos, de los que destacó el 6o. por su calidad y fue premiado con arrastre lento. El rejoneador Alejandro Zendejas: Palmas. Joselito Adame (negro y oro): Palmas, dos orejas y dos orejas. Octavio García "El Payo" (azul turquesa y oro): Oreja, oreja y oreja con petición.Incidencias: Los Forcados Queretanos consumaron una buena pega al segundo intento y fueron ovacionados. Al final del festejo los dos espadas salieron a hombros en compañía del ganaderoJosé González. No hubo sobresaliente, que en este caso debió de ser un novillero, según se establece en el artículo centésimo cuarto, del Capítulo Decimotercero, del Reglamento Taurino vigente en el Municipio de Querétaro.


Comparte la noticia