El Municipio del Distrito Metropolitano de Quito reformó la Ordenanza número 106 que regula los espectáculos taurinos con el propósito de adaptarla al resultado de la pregunta 8 de la Consulta Popular llevada a cabo en mayo.
La decisión del cabildo se resolvió tras un debate político y legal en el que la mayoría de concejales cuestionaron el proceso de consulta promovido por el régimen y relievaron la importancia que para la ciudad comportan los espectáculos taurinos, aunque –señalaron- la obligación del municipio de ajustar la legislación municipal de acuerdo con el pronunciamiento popular.
En esa lógica, 13 de los 15 concejales aprobaron la modificación, conforme a lo explicado por el concejal Alonso Moreno presidente de la Comisión Taurina del Municipio los cambios se concentran en los artículos que guardan relación con la muerte del animal en el ruedo, con la reforma, las reses deberán ser apuntilladas, es decir sacrificadas tras su lidia en los chiqueros de la plaza. En lo que guarda relación a los tercios de varas y banderillas, estos se mantendrán intactos y se desarrollarán con normalidad, "lo que se busca es tratar de preservar el espectáculo" afirmó el edil Pablo Ponce quien impulsó la propuesta de "menores modificaciones posibles" a la ordenanza.
El hilo conductor de la discusión fue reconocer la trascendencia histórica, cultural, económica y social de los espectáculos taurinos y de la Feria de Quito y la ausencia de un debate de tema conducido de forma seria y objetiva, la reunión se llevó a cabo en un ambiente de expectativa y tensión con la asistencia de organizaciones taurinas y opositoras, las que manifestaron su inconformidad por la poca consistencia del proceso de consulta, la debilidad de sus resultados y sus consecuencias.
Los profesionales del toreo anotaron su insatisfacción por la medida, el matador de toros Álvaro Samper señaló que dentro del esquema negativo que vive el espectáculo taurino es coherente que se preserve la mayoría del contenido del reglamento taurino, sin embargo, precisó "soy matador de toros con alternativa y es doloroso que no se respete la integridad de la fiesta".
En la misma línea opinó el diestro ecuatoriano Martín Campuzano, afirmando que todo el proceso fue negativo para la fiesta de los toros y que se debe considerar la posibilidad de revertir la medida. Milton Calahorrano presidente de la Unión de Toreros del Ecuador lamentó la resolución municipal y afirmó que los toreros "desde el respeto que les caracteriza acatarán una resolución de la que se manifiestan "absolutamente contrarios” al tiempo que exhortó a los aficionados a concurrir a la próxima Feria de Quito para manifestar su voz de protesta.
La reforma de la Ordenanza 106 asegura la presencia y realización de la Feria de Quito de este año, evento en el que anuncian su participación importantes figuras del toreo, como Enrique Ponce, Sebastián Castella y David Fandila "El Fandi", que ya fueron contratados.