La cornada que sufrió ayer Juan Mora durante la última corrida de la Feria de San Fermín de Pamplona es más alarmante de la cuenta, pues el diestro tiene afectado el nervio ciático que le ha producido una inmovilización total de la pierna derecha.

El torero sigue ingresado en la clínica después de haber sido intervenido ayer en la enfemería de la plaza de dos cornadas: una en la ingle, de 20 centímeros de extensión, que tocó el hueso de la pelvis; y otra de 15 centímetros que le llegó hasta el fémur.

Además, presentaba una herida en el escroto, producto del fuerte derrote que le dio el toro cuando estaba toreando con el capote.

Su estado de salud es estable y esta mañana lo han levantado de la cama para sentarlo en un sillón, aunque deberá permanecer varios días ingresado y bajo observación médica, con la finalidad estar alertas a cualquier complicación que pudiera presentarse.