Con una entrada considerablemente mejor a cualquiera de las que vimos el año pasado, comenzó esta segunda parte de la temporada. Y no está de más, pues ahora los carteles vienen con más tirón, más difusión, y las corridas de aniversario están a la vuelta de la esquina.
La gente en el tendido habla ya de las corridas de los próximos domingos y de aquéllas que no pueden perderse; de los toreros que actuarán y de los que no están contemplados por la empresa. Así que, en general, hay buenos augurios para el resto de la temporada.
En esta ocasión, aparte de los momentos emocionantes que nos dieron Humberto Flores y Miguel Abellán con el capote, hay que hacer mención de otro torero, que aunque de plata, nos regaló los momentos más emocionantes de la tarde.
¿Quién ha dicho que los toreros de plata no tienen arte, maestría u oficio? ¿quién se atrevería a decir que no emocionan tras un buen par de banderillas? Por eso, hoy hay que hacer especial reconocimiento del gran nivel que ha alcanzado el banderillero Christian Sánchez; de lo consolidado que se le ve, invariablemente, tarde tras tarde. Y hoy puso de pie al público.
Al segundo toro que correspondió a Humberto Flores, le clavo dos pares espectaculares que emocionaron sobremanera al tendido. El público, de pie, le brindó una sonora ovación al tiempo que se recuperaba de la voltereta que le pegó el toro tras colocarle el tercer par -que hoy los banderilleros nos dieron bastantes sustitos.
Sin embargo, no sólo fue el público quien le reconoció su valerosa actuación, sino que una vez que había regresado al burladero, Humberto Flores lo llamó de nuevo al tercio, en donde le brindó la muerte de "Bellotero". Fue un buen gesto que la gente, de nuevo, reconoció aplaudiendo con fuerza.
Enhorabuena Christian, y que sigan los triunfos.