Banners
Banners
Banners

El comentario de Juan Antonio de Labra

Jueves, 07 Feb 2019    CDMX    Juan Antonio de Labra | Opinión     
...sumando la asistencia de público a las dos tardes, se puede..."
Las dos corridas de aniversario en la Plaza México dejaron muchas satisfacciones al público que hizo un par de buenas entradas, aunque quizá no cómo se esperaba si se considera la calidad de los dos carteles programados por la empresa para esta celebración.

Al final, sumando la asistencia de público a las dos tardes, se puede calcular un aforo conjunto de unos 50 mil espectadores, lo que antes se cosechaba casi en una sola corrida, pues la plaza tiene una capacidad aproximada a las 42 mil localidades.

Si el lunes 4 acudieron unas cinco mil personas más que el martes 5, se debió a que éste era un día laboral; o también porque está comprobado que para la economía de la mayoría de las familias resulta imposible comprar boletos de toros para dos fechas consecutivas.

Como es habitual en este tipo de programaciones, resultó muy significativa la presencia que tuvieron los aficionados de provincia, y otros muchos llegados de distintos países, lo que para ellos fue un gozo poder asistir a sendas corridas en este escenario en un lapso de 24 horas.

Un gran acierto fue no haber programado una corrida el domingo 3 de febrero, con el Super Bowl de por medio, así que era preferible hacerlo el martes 5, que no deja de ser una de las fechas clave del calendario taurino americano, y a reserva que, desde el año 2006, ya no es un día inhábil, lamentablemente para el impacto en taquilla de esta corrida tan emblemática.

Y lo mejor de todo fue que los toros de Montecristo, y más aún los de Los Encinos, permitieron el lucimiento de los toreros, que rayaron a gran nivel, siendo, numéricamente, Joselito Adame el máximo triunfador al haber cortado tres orejas… y sin ningún ejemplar de regalo de por medio, hecho que hasta se puede considerar como noticia.

Al margen de la concesión de trofeos, que en ciertos casos se hizo con cierta manga ancha por parte de unos jueces de plaza que ya no valoran siquiera la colocación de las estocadas, la gente salió toreando del coso de Insurgentes tras disfrutar de la variedad de estilos y conceptos taurinos a cargo de los toreros que actuaron, tanto a pie como a caballo.

Fue una lástima que Diego Ventura no hubiese tomado la decisión de lidiar dos toros de Montecristo, y en cambio trajera un par de ejemplares de El Vergel que no embistieron. Pero así suceden a veces las cosas, y hay apuestas que se pierden. De cualquier manera, ahí queda detalles de su toreo y el hecho de que el público ya lo identifica como una figura de su gusto.

Acicateado por la presencia de Ventura en estos festejos, Pablo Hermoso dio una tarde de maestro, y por eso dicen que la rivalidad, aunque indirecta entre ambos, es muy sana para el espectáculo.

Ahora ya nada más queda la Oreja de Oro de próximo domingo, que no se trata de una corrida sólo de triunfadores, pues en su caso debieron aparecer dos toreros que cortaron orejas y ya no volvieron, como son Uriel Moreno "El Zapata" y José Luis Angelino, pero hace varios años que renunciaron a la Asociación Nacional de Matadores, institución que organiza este evento para allegarse fondos a sus arcas.

También se echa en falta el nombre de Fabián Barba en este festejo, toda vez que también cortó una oreja de ley y resultó herido en aquella corrida del pasado 6 de enero.

Y hay que destacar la presencia de Arturo Saldívar y Sergio Flores en esta combinación, dos toreros que le aportan interés a una tarde con la que concluye una Temporada Grande en la que hay aspectos dignos de ser destacados, y de los que habrá oportunidad para ahondar en el comentario más adelante.


Comparte la noticia