La segunda mesa redonda organizada por los Bibliófilos Taurinos de México, con motivo del 30 aniversario de su fundación, mantuvo el interés de los asistentes al Foro Cultural Chapultepec donde se habló del tema "Literatura taurina", expuesto por
Con la bienvenida del presidente del grupo,
Miguel Luna Parra, y la moderación de
Eduarto Heftye, se dio paso a una amena e ilustrativa charla en la que cada uno de los ponentes comentó diversos aspectos sobre el presente y el pasado de las letras taurinas.
García Bolio explicó con detalle los avances que ha hecho la biblioteca que lleva su nombre, instalada en el Centro Cultural Tres Marías de Morelia, encabezado por el destacado coleccionista Marco Antonio Ramírez Villalón, donde hoy día se cuentan 12 mil títulos, 85 de los cuales ya están disponibles on-line en la página web bibliotoro.com.
Este catálogo irá aumentando conforme transcurran los meses, pues una de las mayores inquietudes del responsable de este acervo único en el mundo, es el de difundir la cultura taurina a través de la red, y que más público pueda tener acceso a joyas de la bibliografía taurina universal.
Desde 1985 a la fecha, tanto Marco Antonio como Salvador se han dado a la tarea de conformar esta biblioteca que tiene sus puertas abiertas para la consulta y visita de cualquier persona que esté interesada en los magníficos archivos que ahí se guardan.
Por su parte, el escritor Jorge F. Hernández, siempre profundo e irónico, cautivó al público hablando sobre diversas anécdotas taurinas relacionadas con la literatura, y de su estadía en España cuando cursó el doctorado en historia, así como sus viajes a distintas regiones y plazas de toros.
Habló con claridad sobre la importancia de la lectura, no sólo taurina, y la falta de cultura en general que atenaza a las nuevas generaciones, en un país donde, lamentablemente, se lee un paupérrimo promedio de medio libro por persona al año.
Asimismo, comentó sus inicios como aficionado que buscaba textos ilustrados, pues las imágenes formaban parte de su imaginario taurino, sobre todo en esos años de su niñez en que vivía fuera de México. Y a partir de esta idea de lo que representa una imagen, concluyó en la significación de entrar de lleno en la literatura sin el apoyo de ilustraciones.
Recomendó dos obras clásicas de la literatura española, como son "Currito de la Cruz", de Alejandro Pérez Lugín y "Sangre y arena", de Vicente Blasco Ibáñez, así como el famoso libro "Juan Belmonte, matador de toros", de ese gran escritor y periodista Manuel Chávez Nogales que estaba fichado por la falange.
Juan Antonio de Labra también desveló sus primeras lecturas taurinas, cuando a la edad de doce años un amigo de Rodolfo Gaona, que visitaba la casa de sus padres, le prestó "El sentimiento del toreo", de Enrique Bohórquez; y de ahí a ese primer libro que le regaló su madre, cuando ya tenía 17 años, escrito por Filiberto Mira: "Vida y tragedia de Manolete", editado en 1985.
El periodista tapatío habló sobre la relevancia de los textos que dejan huella; aquellos que aportan teorías para comprender mejor al toro, al torero o el toreo, y denostó las obras de poca monta que están plagadas de egolatría o errores.
Recomendó los libros de toros escritos por Álvaro Domecq y Díez ("El toro bravo") y "Por las rutas del toro", de Joaquín López del Ramo, así como "Tauromagia", de Guillermo Sureda, y "Los arquitectos del toreo moderno", de la autoría de Pepe Alameda, mientras que en el renglón de la poesía alabó la calidad de "Dios y los toros", del sacerdote jesuita Ramón Cué.
Al final se dio paso a una serie de preguntas en las que varios aficionados plantearon distintas inquietudes a los panelistas, y acto seguido se dio paso al brindis de costumbre para celebrar un encuentro que tuvo un agradable nivel cultural gracias a las aportaciones de los tres invitados.
La próxima mesa redonda será el miércoles 15 de octubre, a las 19:00 horas, en el mismo lugar, y estarán presentes los ganaderos Eduardo Martínez Urquidi, de Los Encinos; Luis Álvarez Bilbao, de Barralva, y Juan Pedro Barroso, de Jaral de Peñas, para hablar sobre "Nuevos encastes en el campo bravo mexicano", bajo la moderación del bibliófilo José Antonio Villanueva Lagar, autor de ese magnífico libro "Encaste San Mateo", publicado en 2008. La entrada es libre, y la invitación será, como de costumbre, abierta.