Eduardo Del Villar, cabo de los Forcados Hidalguenses, sufrió el pasado domingo en La México la rotura del músculo recto femoral, lesión que posiblemente requiera de una intervención quirúrgica; sin embargo, se encuentra contento por la actuación del grupo, que redondeó una gran pega

El cabo de los forcados manifestó lo que se siente escuchar la ovación de los aficionados que asistieron el domingo pasado a la Plaza México, comparándola con el rugido de un León.

Del Villar se siente satisfecho con los resultados de la novillada del domingo pasado, a pesar de haber salido con un esta lesión, misma que está siendo evaluada y en observación, esperando que no sea necesario llegar a la sala de operaciones para ser intervenido.

Sin titubear, expresó que lo volvería a hacer cuantas veces sea necesario debido al gran amor que le tiene a su grupo, a cada uno de lo que considera hermanos, pero sobre todo al arte de pegar toros.