Banners
Banners

Ruedo: Desbarajuste

Miércoles, 24 Abr 2013    México, D.F.    Heriberto Murrieta | Opinión   
La columna de este miércoles en Récord

Por segunda vez en lo que va del año, los empresarios mexicanos se quiebran la cabeza para  reconfigurar sus carteles ante la ausencia de su máximo atractivo, Julián López "El Juli", herido de gravedad el viernes pasado en la Maestranza de Sevilla.

En enero pasado tuvieron que hacer muchos cambios debido a su accidente automovilístico. Ahora, encaran las consecuencias del drama en La Maestranza. Ya le había avisado el toro de Victoriano del Río. Se le colaba por el lado derecho. A pesar del evidente peligro, Julián no se achicó y se quedó quieto como un poste, hasta que llegó el gañafonazo. 

Vienen al caso las reflexiones de Manolo Martínez en el libro El Toreo-Verdad: "Torear con arte es la manera más peligrosa de torear. Si tu cuerpo está totalmente natural, estás indefenso. Si estás haciendo un toreo sobre los pies, andas a la defensiva y entonces tus músculos están listos para mover una pierna rápidamente, por lo que resulta más difícil que el cuerno del toro penetre en la pierna que se va yendo. En el toreo asentado, quieto, estás totalmente parado y como no esperas el derrote, entonces llegan las cornadas más graves". 

Manolo es gráfico en su explicación: "Debe parecer que te encuentras tan tranquilo como si estuvieras esperando el camión, sabiendo que no se va a subir a la banqueta y lo vas a ver pasar con naturalidad. Así debe ser en el toreo. Estás parado como si nada, entregado; no estás con el músculo tenso a la reacción. No es lo mismo que el pitón pesque mi pierna yéndose, a que la pesque quieta. Los toreros que hacen eso con su cuerpo son los que torean más bello y con más verdad".  

Pero hay algo que llama la atención: a lo largo de los años hemos informado sobre decenas de cornadas en la femoral, sin embargo, no recuerdo que en alguna de ellas se haya presentado una hemorragia interna al día siguiente del percance. ¿Algo se hizo mal en la operación? El caso es que el diestro madrileño tuvo que ser reoperado y mientras que son peras o son manzanas, el hombre está en "el hule" sin posibilidades de venir a México. Por lo pronto, ha perdido oficialmente cinco fechas: Aguascalientes, Tlaquepaque, San Luis Potosí, Torreón y Juriquilla. Otras siete están en el aire. ¿Podrá cumplir con ellas o las cancelará en definitiva?

Anuario de lujo

Apareció el Anuario Matador de la Temporada Grande 2012-2013 en la Monumental Plaza México. Editado por Rafael Cué, consta de 100 páginas con una impresión de gran calidad. Contiene las crónicas de las 19 corridas del serial y más de 400 fotografías, así como entrevistas con el pintor colombiano Fernando Botero y los matadores Morante de la Puebla y Alejandro Talavante. El tiraje es de 15 mil ejemplares. Ya está a la venta en las librerías Porrúa, locales cerrados y puestos de la Feria de Aguascalientes, a un precio de 50 pesos. 

Rafael me invitó a colaborar con un texto que titulé: "Mi hemisferio derecho en la Temporada Grande". Este es un fragmento: 

"Mi pobre memoria corta no da para mucho, quizá por esa marcada tendencia a evocar con patológica nostalgia y adherir a mis entrañas las cosas que ocurrieron hace mucho tiempo.  

"Más que recuerdos quedan sensaciones: ¿qué sentí al ver aquel muletazo hondo, al escuchar las sentidas palabras de un brindis, al observar atónito las decisiones disparatadas de los jueces, al darme cuenta de que se les olvida ordenar un minuto de silencio para recordar a valiosos personajes fallecidos, al ver torear soberbiamente a un torero con poco rodaje? Finalmente el toreo es, además de un arte, también un sentimiento. 

"En el aficionado-redactor, el conflicto es eterno: ¿qué es lo que se debe priorizar, lo ‘importante’ o lo que me dejó más huella?, ¿cómo debo ‘cabecear’, con el resultado llano o con aquello que llenó mi pupila? Es una lucha mental desgastante que se puede resolver de dos maneras: entremezclando en la crónica información y opinión, añadiendo una ficha con los datos 'fríos' de la corrida a la manera del extinto Francisco Lazo, o bien, como es mi caso, desarrollando la opinión en una columna entre semana, opinión que fue imposible verter en la reseña (…) En todo caso, la encomienda es contarle al lector qué fue lo que pasó en el ruedo.  

"Como en esta publicación la pluma independiente de Cué ya se encargó de relatar lo que sucedió festejo a festejo, me gustaría reflexionar sobre lo que captó mi hemisferio derecho, el de las emociones. Si bien es cierto que no es lo mismo presenciar una corrida in situ que ver su resumen por Internet desde Italia, la magia de Morante logró descongelar las imágenes cibernéticas y se presentó como un relámpago de belleza arrebatadora. El fajo de naturales morantistas al toro de San Isidro me subyugó a diez mil kilómetros de distancia".

Mejoría

Enrique Hernández Flores se recupera de los males que le aquejaron seriamente hace algunas semanas. Actualmente tiene 85 años de edad, 58 de los cuales los ha dedicado al periodismo taurino. Sigue realizando con entusiasmo su programa radiofónico "Fiesta Brava" de Grupo Acir. Un abrazo muy afectuoso al veterano locutor poblano.  


Noticias Relacionadas







Comparte la noticia