Este mediodía, Diego Silveti debutará como matador de toros en la monumental de Quito, Ecuador, una plaza en la que el año pasado, todavía como novillero, dejó un gratísimo sabor de boca y se alzó con un importante triunfo que le sirvió para ser contratado nuevamente.

Y es que, en aquella tarde, el toreo de dinastía le tumbó una oreja al primer novillo de su lote, mientras que al segundo lo bordó en una faena sensacional que, a la postre y tras la estocada, derivó en el corte de los dos apéndices de un novillo que brindó al mítico Manuel Benítez "El Cordobés".

La corrida de esta tarde será la quinta en tierras americanas de Silveti, luego de confirmar en La México y ligar actuaciones destacadas en cosos como Guadalajara, Irapuato y Valencia, Venezuela, en los que ha dejado la huella de su toreo.

Diego Silveti compartirá cartel con el francés Sebastián Castella y el torero local Diego Rivas, quienes lidiarán un encierro compuesto por los hierros de Triana y Huagrahuasi.

En los dos últimos días, Diego ha acudido a los festejos celebrados en Quito para tener un panorama más preciso de cómo opera la nueva modalidad de la lidia sin la muerte del toro en el ruedo. Asimismo, ha hecho ejercicio de aclimatación visitando el teleférico, y corriendo en el páramo a las faldas del volcán Pichincha, que está a 4.135 metros sobre el nivel del mar.