El Partido Animalista Con el Medio Ambiente (PACMA) que encabeza el principal movimiento antitaurino de España, obtuvo un severo revés durante las elecciones generales del reciente domingo entre, otras situaciones, al no conseguir ningún espacio de representación en el Congreso de los Diputados.

En números concretos, representa un pérdida global de 60 mil votos menos, en relación con las elecciones del año 2019, por lo que sólo recibieron el apoyo de menos del uno por ciento del electorado, perdiendo total representación en localidades como Ávila, Cuenca, Huesca, Soria, Zamora, comunidades, por cierto, con gran actividad taurina.

Con casi el 100 por ciento de los votos escrutados hasta ahora, el Partido Popular (SS) que lidera el candidato Alberto Núñez Feijóo se perfila a continuar en el poder, aunque todavía sin una mayoría absoluta que les permita tener injerencia en los distintos niveles de gobierno.

Independiente de los resultados, se pone en la palestra el hecho de que tanto la sociedad como la clase política en España, está ocupada en temas de especial relevancia para el país, donde la tauromaquia seguirá ocupando el espacio cultural que de suyo le pertenece a través de la historia.