El banderillero Rubén Ávila se despedirá mañana en la Plaza México, dentro de la corrida del 70 aniversario del monumental embudo de Insurgentes, con lo que pondrá el punto final a una larga carrera como integrante de la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros.

Rubén saldrá en la cuadrilla del francés Sebastián Castella, y dirá adiós a punto de cumplir 25 años como profesional, pues presentó su examen en 1991, el 27 de abril, en la ciudad de Villahermosa, Tabasco. Antes, toreó poco más de cinco años como aspirante.

La decisión está tomada y es el momento para que el banderillero capitalino, a sus 55 años de edad, diga adiós a los ruedos. Uno de sus nietos será el encargado de cortarle el añadido.