La ciudad mexicana de Aguascalientes ubicada en la zona centro norte del país vive con intensidad la tradicional Feria Nacional de San Marcos que con el recuerdo del santo patrono convoca a alrededor de un millón de visitantes durante las tres semanas en las que se cumple una nutrida agenda de festejos que incluye actividades artísticas, deportivas, culturales y, claro está, taurinas.
El caso es que en los alrededores de la plaza de toros ubicada a pocos metros del reciento ferial, junto al paseo peatonal de ocho cuadras de longitud en cuyos costados se ubican restaurantes, locales comerciales, puestos de venta de artesanías y, de exhibición, degustación y venta de productos como servicios que encuentran en la feria y en las corridas una oportunidad valiosa para promover marcas y afirmar mercados.
Con más de noventa hectáreas de perímetro, la Feria Nacional de San Marcos cuenta con zonas especiales para cada una de las actividades con parques, senderos, foros y espacios comerciales.
Aguascalientes es el punto de encuentro de artistas, personajes famosos, toreros, periodistas y forasteros que copan a toda hora hoteles, restaurantes, bares discotecas, aceras, teatros, plazas públicas museos y, a partir de las seis de la tarde, la plaza de toros. De la seguidilla de sucesos llaman la atención las peleas de gallos, la exposición ganadera, el teatro popular, las muestras artesanales, los conciertos gratuitos y las corridas de toros; variada secuencia de acontecimientos sazonada por la sabrosa propuesta de la gastronomía regional
Mensajes en radio y televisión, vallas, banderas y pancartas en calles y avenidas; carteles en vehículos y escaparates; revistas, folletos y hojas volantes se encuentran a cada paso para promover un sin fin de espectáculos que dan forma a la larga festividad cuya identidad está marcada por las funciones taurómacas.
Por sus significados sociales, culturales y económicos la anual festividad de San Marcos, instituida hace 185 años, es promovida con entusiasmo por los gobiernos estatal y municipal, en tanto que su organización y gestión corre a cargo del Patronato de la Feria que articula, agenda y difunde los centenares de actos que se llevan a cabo a lo largo del ciclo festivo, entre los que mayor importancia adquieren los que giran en torno a las corridas de toros, el palenque y el casino.
En suma, esta feria de incontestable importancia nacional y cada vez mayor atractivo internacional genera un importante flujo de dinero que ingresa a la economía local, recursos distribuidos entre todos los estamentos del aparato productivo, desde el gran empresario hasta pequeños comerciantes, artesanos, transportistas, etc.
En materia taurina trasciende la presencia de las más importantes figuras del toreo como presentación de libros temáticos, muestras de pintura y, en especial, las clases prácticas de toreo impartidas por Julián López “El Juli” y Joselito Adame con la participación de miles de niños.
Aguascalientes es además cuna de toreros, registra un padrón interesante de espadas que encabeza el mismo Adame y en el que trascienden por sus capacidades Arturo Saldívar, Juan Pablo Sánchez, Octavio García “El Payo”, Arturo Macías y Fabián Barba, entre otros, que otorgan en el ruedo una potente presencia local.
En definitiva, esta ciudad y su gran festividad se consolidan como la mejor feria de América por la duración del ciclo de corridas, 16 tardes, la actuación de prestigiosos diestros, la lidia reses de selectas divisas y sobre todo, por la pasión con que se la vive tarde a tarde en los tendidos de la Plaza Monumental.