Morante, la complexión ancha, la talla corta, el vestido negro, la patilla espesa, un personaje que parece arrancado de una litografía del siglo XIX, despertó fascinación en la noche potosina. El hombre se cuece aparte. Su tauromaquia está revestida de pureza y autenticidad, sin fingimientos ni artilugios, y no hay en el mundo quien pueda igualar su expresión artística. Nos enseña que el toreo no debe ser un ejercicio mecánico practicado por autómatas.
Toreo tan bello como profundo el de Morante con un cárdeno de excelente calidad de San Miguel de Mimiahuápam. La iluminación de El Domo resulta débil, pero a media luz Morante es fosforescente. Hondos muletazos trazó el artista supremo con el compás junto y la figura erguida, la muñeca rota y el acompañamiento cadencioso de cada embestida. La arquitectura de la soberbia faena se basó en los pases fundamentales de impecable técnica y perfecta hechura, todos con personalísimo sello, pero será recordada también por el salero: aflamencados molinetes y afarolados, pinceladas distintivas de una raza, que proyectan el espíritu de este hombre transparente.
"Me sentí muy cerquita de Dios", me dice al final de la experiencia purificadora, al tiempo en que considera la faena quizá la mejor de cuantas ha realizado bajo el cielo mexicano y llama "ignorante" al ciertamente ignoto juez que sólo concede una oreja, misma que el sevillano le lanza desde el ruedo sin aspavientos. Pero qué más da. Después de tanta magia y emoción, sinceramente es irrelevante la falta de sensibilidad artística de la autoridad. Porque cuando pase el tiempo, no nos acordaremos si fue premiado con una o dos orejas o ninguna, pero volveremos a vibrar al recordar aquellos instantes sublimes.
Incansables
Los empresarios Jorge Avila y Manuel Algara hicieron un gran esfuerzo publicitario para atraer público a los graderíos del moderno inmueble de la capital tunera. Y aunque la entrada no fue la esperada, el trabajo inteligente de la mancuerna seguramente alcanzará mejores resultados en la corrida del 26 de abril donde el cartel estará formado por una cuarteta de interés.
El Juli, en Cuernavaca
El madrileño Julián López "El Juli" será el principal atractivo de la segunda corrida de la Monumental de Morelos, a celebrarse el sábado 27 de abril. La presencia de la figura española, que para entonces ya estará en buenas condiciones tras la fractura del brazo izquierdo sufrida en enero pasado, garantizará el segundo lleno consecutivo en el coso gestionado por Lilia Abarca.
Nuevo horario
A partir del próximo lunes 4 de marzo, el programa "Toros y toreros" se transmitirá media hora antes de lo acostumbrado, es decir, a las 11 en punto de la noche, con un interesante contenido sobre lo más destacado del panorama taurino nacional.